Jamás hubo un accidente tan bonito como cuando se cruzaron tu mirada y la mía.

Nos perdimos para amar

Que maravilloso es querer a una persona por los motivos correctos, pero que triste cuando alguien se marcha por las razones equivocadas.

Porque hay personas que se van, creyendo que hay motivos correctos para irse, sin embargo, al poco tiempo se dan cuenta del error que cometieron.

A veces creemos que una persona no nos gusta más, tres veces estamos tan confusos que sentimos no querer más, y lamentablemente nos marchamos, y al final descubrimos, que no es verdad, que no hay otra persona que te haga sentir en un abrazo su hogar, que no había otros mejores ojos para refiejarnos que los que dejamos atrás, y terminamos llorando frente a la vida porque no sabemos en qué momento nos perdimos para amar.

No hay comentarios.: